Creatividad en tu materia (entrada primera de #materiacreativa)

Siguiendo en la línea de mi reciente entrada en EducaconTIC, «La creatividad, como las bicicletas, es para el verano«, hoy he comenzado en Madrid un curso titulado «Creatividad en tu materia». En este curso, organizado por FERE dentro de su Escuela de Verano, participan compañeros y compañeras de Educación Infantil, Primaria, Secundaria y FP. Tenemos tres días para reflexionar en torno al papel de la creatividad en la educación y para analizar cómo ponerla al servicio del aprendizaje en las materias del currículo. Si te apetece, también estamos usando Twitter con el hashtag #materiacreativa.

Este primer día ha estado dedicado a la creación de una atmósfera de trabajo apropiada y a una primera exploración de los conceptos. En relación con el primer objetivo hemos dedicado la primera parte de la mañana a distintas estructuras cooperativas para que los participantes se conocieran y se crearan lazos de trabajo.

En relación con esta primera «exploración de conceptos» hemos usado distintas técnicas creativas como las analogías y el brainstorming para promover la reflexión en torno a la definición de «creatividad» y los factores que la promueven o inhiben. En las imágenes a continuación podéis ver algunos resultados:

Para responder a la pregunta de qué es la creatividad hemos usado primero analogías; mediante este recurso hemos pensado que la creatividad es como tejer una red, preparar un guiso, contar un cuento, hacer un regate o un barco en el mar rompiendo el horizonte, entre otras imágenes. Gracias a estas analogías hemos comentado ideas como que la creatividad va más allá del estereotipo romántico (que llega hasta el siglo XXI) del ser creativo; o que la creatividad también se siente y expresa a través del cuerpo, como bien saben las personas que bailan, por ejemplo; o que la creatividad requiere conocimiento del mundo e incluso modelos y patrones que seguir, aunque sea para cambiarlos y mejorarlos; o que la creatividad va más allá del «chispazo creativo» y también incluye el proceso de trabajo y la obtención de un producto de calidad.

Posteriormente hemos realizado la tormenta de ideas respecto a términos que relacionamos con la creatividad. Aquí nuestra reflexión ha sido más sencilla: si estos términos es lo que entendemos por creatividad, en algún sentido representan nuestro propio compromiso si queremos ser personas creativas en educación: han surgido palabras tan interesantes como «desvergüenza», «valentía», «caerse y levantarse», «arriesgarse», «iniciativa» y «libertad». ¿Seremos capaces de mantener estas afirmaciones mañana, cuando empecemos a diseñar proyectos para el aula?

Finalmente, hemos analizado los factores que potencian o que impiden o inhiben la creatividad. Encontrar un punto de equilibrio entre ambos puede ser un buen arranque aunque nuestra intención tiene que ser eliminar (o minimizar) aquellos factores que bloquean la creatividad.

Para acabar hemos «leído» tres versiones de «El arenque rojo«, un interesante libro abierto de Gonzalo Moure y Alicia Varela. La razón es bien sencilla: ¿y si leer el currículo fuera como leer El arenque rojo? Nuestro siguiente paso en la vía de la creatividad será explorar el currículo como quien lee un texto narrativo abierto. Te dejo, por ello, con un clip de vídeo de El arenque rojo:

Coda: Hablar de creatividad en educación y no hablar de PLE es, desde mi perspectiva, una incongruencia. Por ello hoy hemos dedicado un tiempo a definir qué es un PLE, que elementos integran nuestro PLE y cómo puede servirnos dentro del contexto en el cual nos encontramos. Por lo pronto buena parte de los participantes se han abierto un perfil en Twitter hoy mismo para participar en la conversación y mañana seguiremos intentando promover el debate a través de la red con #materiacreativa. Y tú, ¿cómo tienes tu PLE? Échale un vistazo al libro editado por Linda Castañeda y Jordi Adell, Entornos Personales de Aprendizaje: claves para el ecosistema educativo en la red, si quieres saber más sobre el tema.