La formación del profesorado y la calidad del sistema educativo: Javier Valle
Asisto a la segunda sesión del Seminario organizado por la Fundación Francisco Giner de los Ríos y la Fundación Estudio, hoy dedicada a la relación entre la formación del profesorado y la calidad del sistema educativo. Paso a modo Twitter para narrarla:
Tiene la palabra Javier Valle, que ya ayer presentó su «mirada internacional» sobre el tema:
- El profesorado es una clave para la mejora educativa pero no es la única: hay muchas otras variables «contextuales» que inciden en la calidad y la mejora.
- No hay un modelo único ni universal de formación del profesorado que podamos tomar como ejemplo.
- Bolonia, en la universidad, ha sido una oportunidad perdida para el cambio metodológico.
- Es un mito pensar que «esto se hunde»: hay logros y valores que no se pueden obviar.
- Presenta la idea del Lifelong Teacher Education como un paradigma que garantice una posible mejora.
- Se pregunta a continuación hacia dónde debemos orientar nuestro sistema educativo y nuestro modelo de formación del profesorado y la respuesta es hacia la Unión Europea y sus propuestas, descrita en una ingente literatura.
- Cita documentos como la Comunicación de la Comisión al Consejo y al Parlamento Europeo «Mejorar la calidad de la formación del profesorado«, «Common European Principles for Teacher Competences and Qualifications«, Conclusiones del Consejo sobre la mejora de la calidad de la educación del profesorado, Supporting Teacher Educators for better learning outcomes, Supporting Teacher Competence Development for better learning outcomes y Developing coherent and syste-wide induction programmes for beginning teachers: a handbook for policymakers.
- Los documentos europeos indican que el nuevo rol del profesorado es promover experiencias de aprendizaje de los ciudadanos del siglo XXI, formar ciudadanos europeos y promover cambios en la sociedad del conocimiento.
- Señala algunos principios comunes: debe ser una profesión bien cualificada, enmarcada en el paradigma del lifelong learning y el aprendizaje por competencias, con promoción de la movilidad y con habilidad para el trabajo por competencias.
- Indica, atendiendo a los documentos de la Unión Europea, que el mayor reto es el diseño de una «política coherente» y ésta ha de considerar el paradigma del aprendizaje permanente a lo largo de la vida: coherencia en el lifelong learning.
- Tras revisar muchas de las aportaciones de los documentos que he enlazado arriba, Javier realiza varias comparaciones dentro del marco europeo: limitación al acceso al Grado de Educación, las diferencias en modelos de formación inicial del profesorado, la proporción de didácticas específicas en la formación inicial del profesorado en los diferentes países de la Unión.
- Comenta ahora la importancia de una fase de «cualificación en el lugar de trabajo», realizada en Alemania desde 1900 (dos años de duración), en Reino Unido desde 1906 o en Francia desde 1952. Esta fase, detalla, debe tratar tanto con la dimensión formativa y la organizativa como la dimensión «evaluación y control» y para ellos los estudiantes en prácticas deben tener mentores cualificados y recompensados (salarios y reducciones de horario fundamentalmente).
- Analiza ahora la carga en créditos entre la teoría y el Prácticum (160 frente a 50 créditos) en los Grados de Infantil y Primaria. En Secundaria el Prácticum representa el 31% de la carga crediticia.
- Puntos fuertes del sistema de formación del profesorado: aumento de un año de la formación, más formación práctica, más centrada en competencias (aunque de manera insuficiente y superficial) y más sensible a temas como las TIC, la inclusión, los idiomas o la interculturalidad.
- Puntos débiles del sistema de formación del profesorado: poca selección de entrada, poca práctica, profesorado poco experimentado, centros poco especializados, entre otros.
- ¿Qué es el Lifelong Teacher Education? Supone valorar el acceso a la formación de manera exigente, la formación por compentencias, la selección para la profesión y la inducción, formación permanente, formación directiva cualificada (incluso con grado de Máster) y que permita una progresión en la carrera profesional. Además, para ello debemos preguntarnos quién forma a los maestros y éste debe tener cualificación y experiencia.
- Acaba su ponencia: «En los malos momentos el pesimista sólo encuentra excusas, el optimista piensa nuevos proyectos.»
Hola Fernando,
En mi opinión, la calidad de la enseñanza no mejorará hasta que el alumno pase a ser el «cliente», y no la excusa para que el sistema siga funcionando.
Desde que era un crío me ha llamado la atención que la mayoría de los profesores que he tenido no pasaban de mediocres, y es una impresión compartida por mucha gente. Y esto se debe, creo, a que no hay ningún medio de control y gestión sobre su calidad docente.
Las exigencias que sufren los profesores son de orden burocrático, pero no se ha implantado ninguna forma efectiva de control y posterior mejora de su calidad como docente.
El sistema precisa de una reforma profunda.
Un saludo
Pablo Caballero