Experiencias memorables de aprendizaje con tecnología: ponencia en Samsung Smart School

El pasado viernes me monté en un avión con dirección a Hamburgo. Tras oír las indicaciones de la tripulación puse mi teléfono en modo avión y me dispuse a disfrutar del vuelo. Todo transcurría con normalidad hasta que alcanzamos los 10.000 metros de altura. El comandante se dirigió al pasaje y nos anunció que habíamos alcanzado la altura de vuelo que mantendríamos durante las siguientes tres horas y que podíamos quitarnos los cinturones de seguridad ¡y conectarnos a la wi-fi! Al instante activé la wi-fi de mi teléfono y, efectivamente, allí estaba la señal. Poco después estaba enviando y recibiendo mensajes a través de distintas redes sociales, leyendo y contestando mi correo, navegando por la red y, sobre todo, escribiendo una larga serie de mensajes con mi hijo y con mi hija, a quienes – por otro lado- les parecía lo más normal del mundo tener wi-fi a 10.000 metros de altitud. En pocas palabras, la experiencia de volar, sobrecogedora de por sí, se había hecho memorable para mí gracias a la tecnología.

Ayer, en el I Encuentro de Profesores Samsung Smart School, tuve la ocasión de reflexionar sobre este hecho gracias a Samsung España y el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Se dieron cita en la Biblioteca Nacional los centros educativos que están participando en este interesante programa de Samsung y del Ministerio y que ha permitido a más de doscientos profesionales de la educación y a unos mil estudiantes utilizar tabletas y otros recursos tecnológicos para «rediseñar» su aprendizaje. El programa, además de la dotación tecnológica, incluye formación e investigación, para lo cual las dos instituciones han contado, entre otros, con el apoyo de Cristobal Suárez y la Universidad de Valencia y con los compañeros y compañeras de Innova School. En resumen, el Programa Samsung Smart School me parece un programa interesante, con un componente fundamental de apoyo a centros públicos que apuestan por la escuela inclusiva, y merece la pena que le prestemos atención.

En mi ponencia, planteo que la tecnología – como en el caso de mi vuelo a Hamburgo – puede contribuir a crear experiencias memorables de aprendizaje, especialmente si para ello optamos por metodologías activas de enseñanza como el aprendizaje basado en proyectos (ABP). Y juntas, tecnología y ABP, representan una combinación poderosa para construir una escuela inclusiva que permita el desarrollo de las competencias clave de todo el alumnado. En todo caso, la creación de estas «experiencias memorables» depende del proceso de reflexión y diseño que el profesorado esté dispuesto a realizar. Precisamente con mi participación en este encuentro, y aun más en el debate posterior, intenté demostrar que en la escuela hay muchos profesionales dispuestos al cambio desde la instrucción directa hasta las metodologías activas, y muchos otros que ya lo están realizando, como estos docentes que participan en el Samsung Smart School. Os dejo aquí mi ponencia y también el vídeo completo de la sesión del día 23 en la Biblioteca Nacional.