ROC andaluz
En el título de esta entrada no hay una errata. No encontrarás aquí información sobre Triana o vídeos de Medina Azahara. Escribo sobre el ROC andaluz, los Reglamentos Orgánicos de Centros Educativos propuestos por la Consejería de Educación andaluza en julio de 2010 y que abren el plazo para que los centros revisen y actualicen sus Planes de Centro con la nueva normativa.
Estos reglamentos incorporan bastantes novedades (más en Secundaria que en Primaria) y han sufrido una contestación importante por parte de los sindicatos, que han atacado diversas propuesta contenidas en el ROC, tanto durante su gestación como tras su aprobación.
Sin embargo, ahora, con el ROC en la calle, llega el momento de sacarle partido haciendo una lectura creativa y comprometida de la normativa. Es el momento de explorar hasta dónde podemos ir con este nuevo ROC, qué tipo de escuela nos permite construir, cómo podemos trabajar en este nuevo marco para atender a nuestro alumnado en las mejores condiciones, con una enseñanza de calidad y desde la máxima de la inclusividad y la equidad.
Esta era la idea cuando los centros del profesorado de la provincia de Sevilla me invitaron a inaugurar con una ponencia las Jornadas Provinciales sobre ROC (puedes encontrar el tuiteo que mi compañero Miguel Ángel Ariza hizo de la sesión con el hashtag #sevillaROC). La Jornadas han comenzado estos dos últimos días, el 1 de diciembre con los equipos directivos de Educación Primaria y el 2 de diciembre con los equipos directos de Educación Secundaria, pero su desarrollo transcurre hasta abril de 2011 con ponencias que tratarán los diversos aspectos del ROC.
Por mi parte me he centrado en buscar la respuesta a dos preguntas: ¿Cómo puede el ROC y el Plan de Centro contribuir al éxito académico de todo nuestro alumnado?¿Cómo puede el ROC y el Plan de Centro promover el éxito social de todo nuestro alumnado? Y, al mismo tiempo, he preguntado a los asistentes a la presentación cuál es el papel de la dirección en este nuevo contexto y qué pueden hacer sus centros para alcanzar estos dos objetivos.
Los temas en los que me he centrado han sido la coordinación (entre el profesorado, con y entre el alumnado, con otros centros, con otras instituciones y con la comunidad), el contrato de aprendizaje y participación con las familias, los planes educativos de entorno, el centro como proyecto (y el proyecto lingüístico y digital del centro como ejemplo de plan estratégico de actuación) y, finalmente, el diseño de tareas integradas.
En relación con la coordinación hemos considerado qué aparece en el Proyecto de Dirección de los equipos presentes, qué están haciendo ya y cuáles son sus intenciones para el nuevo Plan de Centro en relación con cuestiones como el trabajo en equipo del profesorado, la creación de redes de estudiantes, el trabajo cooperativo en el aula o la colaboración con la universidad. Para ello la referencia fundamental ha sido un artículo de Ángeles Parrilla publicado en 2003 en Aula de Innovación Educativa con el título de «La voz de la experiencia: la colaboración como estrategia de inclusión«.
La participación de las familias es un aspecto central en el nuevo ROC andaluz. Educar es socializar y sin el primer agente de socialización nuestra tarea es mucho más complicada – ¿o imposible? El ROC andaluz promueve que los centros firmen con las familias un contrato que promueva su participación en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Aunque muchos centros ya lo están utilizando, y por tanto hay modelos disponibles, he preparado un «contrato de aprendizaje y participación» inspirado en el texto de Felicia Smitth y Christine Hardmon «The Family Learning Contract: a tool to support parent volunteerism and parent accountability«, en el libro «The Many Faces of Parent Involvement: making parent involvement work for your school«. Os dejo aquí el modelo de contrato por si os sirve.
Contrato de Aprendizaje con la famillia
Además de este «contrato de aprendizaje y participación», también hemos discutido cuál debe ser el papel de los educadores en relación con el entorno a través de propuestas como el aprendizaje-servicio o la elaboración de planes educativos de entorno o de propuestas de ciudad educadora. En este sentido, animé a los asistentes para que se hicieran presentes en foros públicos demandando de los candidatos de las próximas elecciones municipales propuestas educativas consensuadas con los centros y que permitan hacer de la ciudad un ente educador de primer fila.
Por último, estuvimos analizando las propuestas que contiene el ROC para el diseño de tareas integradas. El trabajo del ETCP en Primaria y de las Áreas de Competencias en Secundaria puede ser el puente que permita vincular las distintas áreas y materias del currículo para ofrecer una enseñanza más cohesionada, global e integrada. El nuevo ROC puede ser, de esta manera, un motor de innovación y cambio en nuestra cultura de enseñanza.
En resumen, puede que esta nueva normativa nos guste más o menos; puede que la normativa que nos ofrezcan en el futuro nos guste más o menos. Puede pasar incluso que no nos guste nada. Pero si tenemos claro cuál es el modelo de escuela que queremos mantener debemos tener la habilidad para utilizar la normativa para crear ese modelo de escuela que queremos, explorando posibilidades, avanzando si es necesario hasta los límites de la normativa, descubriendo sus fallos y explotando sus aciertos. Lo importante no es la normativa; lo importante son nuestros estudiantes y el trabajo que hagamos con ellos.
Salud
PS Gracias a la Red de Centros del Profesorado de la Provincia de Sevilla por confiar en mí para este encargo. Gracias, compañeras y compañeros de los CEP, espero que no os hayáis arrepentido de llamarme 😉
Fernando, es un placer leer tus entradas! Magnífico! Gran trabajo!
Ya he dicho en varios foros que las CCBB y la escuela 2.0 van a cambiarlo todo, antes o después, mejor o peor y eso asusta a los/as que se creen poseedores/as del saber, a los/as son divinos/as de la muerte porque son perfectos/as y no tienen porqué cambiar nada (¿»libertad de cátedra»?). Y además, el ROC, que les hace quedar fuera de juego en un sistema educativo más colaborativo y que necesita nuevos enfoques y metodologías, cebando su impotencia en la ridiculez del teórico «autoritarismo del director» que les puede obligar a ¡¡¡cumplir su obligación!!!En fin, el tiempo y una caña y la decisión de algunos/as pondrán freno a ese intento de paso atrás.
Pero, sin duda, tenemos que valorar los aspectos positivos y las posibilidades que ofrece para ir llevándolas a la práctica. En eso estamos.
Como sabes, tuve la suerte de estar con vosotros la semana pasada en las jornadas provinciales del ROC. Está claro que las propuestas que hiciste marcan un nuevo hacia el cambio en los centros educativos andaluces. Como muy bien dijo Manolo Gotor: «El nuevo ROC es una buena oportunidad para el cambio en nuestros centros».
Estoy de acuerdo contigo cuando dices que la dirección de los centros supone un compromiso con la sociedad; está claro que la escuela no puede llevar caminos aislados a la sociedad en la que se desenvuelve y para la que es un servicio. En este sentido la reflexión: ¿Escuela y famila? es esencial, es evidente que debemos hacer partícipe a la familias de nuestro trabajo, así que las propuestas: Carta de Servicios, Escuela de padres y madres (desde su perspectiva), biblioteca como lugar de encuentro,Información exhaustiva a familia, jornadas puertas abiertas, participación en aula, contratos de aprendizaje-convivencia me parecen todo un acierto. Realmente creo que este es el camino para la innovación educativa. Está más que demostrado que estructuras de este tipo (comunidades de aprendizaje) resultan más eficaces.
Enhorabuena.