Detrás del #EABE13
Este pasado fin de semana (5 y 6 de abril) hemos celebrado en Algeciras el EABE13. No es fácil explicar qué es el EABE13 ni qué nos motiva a participar en él, incluso si ello implica cruzar el país para disfrutar de 36 horas de encuentro. Si quieres conocer los detalles del qué, te animo a que visites el blog del EABE13. Hoy aquí, permítemelo, hablaremos del cómo.
Comenzaremos por una anécdota. Un grupo de estudiantes de la Universidad de Málaga han participado este año en el EABE13. Son alumnas y alumnos de nuestro amigo Miguel Sola y venían con la intención de realizar una serie de entrevistas a participantes en el EABE13, y una de ellas a mí. ¿Y por dónde empiezan? Pues por el principio: «¿Qué motivación os ha llevado a organizar el EABE13?»
No creas, no es fácil responder a tan simple pregunta: para organizar algo tan complejo como el EABE13 no existe una motivación única o, mucho menos, simple.
Por un lado, Miguel Ángel y yo queríamos organizar el Encuentro en nuestra tierra para contribuir a agitar educativamente la comarca del Campo de Gibraltar y Ceuta. Queríamos intentar reunir a educadores y educadoras relacionados con las TIC porque aspirábamos a que esto sirviera de revulsivo en una comarca que lo necesita urgente y profundamente, en nuestra humilde opinión. Sin embargo, no sé si hemos tenido éxito en este empeño: el número de participantes del Campo de Gibraltar y Ceuta ha sido mayor que en otros EABEs, pero no tan alto como nos habría gustado.
Por otro lado, queríamos hacer ver a las instituciones (delegación territorial de educación, ayuntamiento, centro del profesorado y otras) la potencia del EABE13 como símbolo de la fuerza de nuestro profesorado. Creemos que con frecuencia las instituciones no tienen suficiente fe en nuestro profesorado, incluyendo en el mismo saco a todo los profesionales, estén o no implicados, sean buenos profesionales o no. En este sentido, no puedo ocultarlo, estamos razonablemente satisfechos: el EABE13 ha llamado la atención de las instituciones y ha dado una buena imagen de nuestro profesorado.
En tercer lugar, ambos estamos comprometido con la idea del EABE. En mi caso asisto al EABE desde el Encuentro de Guadix (aunque al año pasado sólo pude asistir el primer día) y este encuentro se ha convertido en una feliz ceremonia anual: hay amigos y amigas a quienes sólo vemos de EABE en EABE y nos apetecía contribuir a ese momento feliz con nuestro esfuerzo y en nuestra propia tierra. Sin embargo, no nos gustaba la idea de un EABE que fuera simplemente celebración ni tampoco sólo reflexión, por muy buena que esta sea: queríamos un EABE de proyectos y compromisos, un EABE de futuro que tuviera incidencia en la escuela y en la vida real, fuera de las 36 horas de catarsis y alegría que supone el EABE. En este último punto me remito a los proyectos que hemos sido capaces de diseñar en el tiempo record de ocho horas.
Con estas ideas nos pusimos en marcha desde el mismo momento en el cual la Asamblea del EABE12 aceptó nuestra candidatura. Aquella misma noche, llevados por la euforia y por el deseo de aprovechar las buenas vibraciones del EABE12 para generar compromisos, abrimos una wiki (que después del #OpenArchidona se abandonó) y un blog. Entendemos que un EABE se engarza al siguiente EABE como una cadena y en ese sentido hemos animado a la organización del EABE14 a que cuanto antes se ponga en marcha: después no sólo faltan días para preparar cosas sino que el final del un EABE es un buen momento para poner la energía del encuentro al servicio del siguiente EABE y de los proyectos que del EABE surjan.
Desde entonces comenzamos un largo camino para ir definiendo cómo sería el EABE13. Y este camino, además, hemos intentado – en la medida de nuestras posibilidades – hacerlo en muchos lugares: aprovechamos una visita a Úbeda para celebrar la primera reunión sobre el EABE13, y allí decidimos poner en marcha los Nodos del EABE13 y también otras ideas que no hemos podido articular (los #KféEABE, por ejemplo); participamos en el #OpenArchidona, donde presentamos la idea del diseño de proyectos como objetivo del EABE13, y donde ya avanzamos que muy probablemente no habría streaming en el EABE si la mayor parte del tiempo estábamos trabajando en grupos, como así ha sido; y también acudimos al #OpenMuralla, en La Calahorra, donde pudimos compartir con los participantes algunos aspectos del programa (trabajo en grupo, elección de temáticas, uso de algunas ideas propias del design thinking, etc.). Si el EABE es camino, nosotros hemos hecho kilómetros para hacer partícipes a quienes acudían a estos encuentros de la organización del EABE13.
Con todo este bagaje, fuimos configurando el programa del EABE13, de cuyos entresijos nos gustaría contaros algunos detalles.
Comenzaremos con la acogida. La acogida al EABE es, sin duda, el momento más importante: el EABE no se puede definir, hay que «sentirlo» y para sentirlo adecuadamente la acogida es fundamental. En este sentido contábamos con una ventaja: el patio central del Hotel Reina Cristina favorece la recepción y la acogida con su estructura circular, sus asientos y su cafetería. Y además de este factor circunstancial, nosotros dispusimos algunos recursos «complementarios»: el «Mapa del EABE», el «Amigo Sensible» (actividad propuesta por nuestro compañero José David), el «café pendiente» o los «talleres ambulantes» propuestos por José Luis Castillo tenían esta intención.
Además, los «grupos de acogida» estaban diseñados con este objetivo en mente. Los grupos fueron creados con una intención y una estructura determinada: en cada grupo había (a) personas de provincias limítrofes con el EABE13, como Cádiz, Sevilla y Málaga; (b) personas de provincias andaluzas más alejadas; (c) persona de fuera de Andalucía; y también consideramos que hubiera (d) personas con experiencia en el EABE y que desarrollan proyectos «potentes» en su entorno y (e) personas con poca experiencia en el EABE o en proyectos de envergadura. En la práctica es importante considerar la dificultad de una acogida excesivamente planificada cuando realmente no sabemos cuándo llegará cada persona al EABE13, o ni tan siquiera quién asistirá, pues hasta poco antes de comenzar el #EABE13 estuvimos recibiendo «bajas» y «altas» en la lista de participantes. Los «grupos de acogida» tenían, también, una función formativa. Además de contribuir a la integración social de los más novatos, los «grupos de acogida» también tenían la finalidad de discutir el sentido de cada uno de los 13 temas elegidos.
La estructura de trabajo del #EABE13 tiene tres fuentes: por un lado, las organizaciones asamblearias de #acampadasol; por otro lado, las secuencias de trabajo del design thinking; y, finalmente, los temas de Hack Education y el Hack Education Day. De ahí la propuesta de temas
y la organización del trabajo en «grupos temáticos» y «equipos de trabajo».
Además, nos dimos a nosotros mismos algunas otras «consignas».
- Queríamos un EABE no sólo sin ponentes ni comunicantes, sino incluso sin Power Points y, efectivamente, hemos conseguido coordinarnos sin una sola presentación.
- Queríamos un EABE slow y creemos que todo el mundo ha tenido tiempo para hablar con calma y sin sentir (demasiada) presión por el horario.
- Queríamos un EABE que no sólo ocurriera en Algeciras sino que permitiera pasear por Algeciras, y por eso nos desplazamos el sábado al Centro Universitario de Estudios Superiores.
- Queríamos un EABE que implicara a instituciones del entorno pero sin dejar de ser fieles a nuestra esencia y podemos garantizaros que la implicación del Ayuntamiento de Algeciras (y de su Concejal de Educación, Bernabé Ramírez), la Fundación Campus Tecnológico de Algeciras, el Centro del Profesorado de Algeciras-La Línea, el Hotel Reina Cristina, la Facultad de Educación y Humanidades de Ceuta, el Estudio de Danza Adagio o el Pub Sixties ha sido enorme y, al mismo tiempo respetuosa con nuestra forma de entender el encuentro.
- Y, finalmente, también queríamos un EABE en el cual hubiera «momentos memorables» y creemos que el rato de risas del viernes no estuvo mal y que el flashmob de las alumnas del Estudio de Danza Adagio fue un bonito recuerdo para quienes pudimos disfrutarlo (como ha sabido ver nuestro genial Antonio Sevilla).
Mención aparte merece el trabajo de Antonio Herreros y Patricia Ariza en el #EABE13infantil. Teníamos muy claro desde el principio que queríamos un EABE en el que la conciliación familiar fuera una realidad y creo que nuestros hijos e hijas no sólo han estado «atendidos» sino que han gozado de un estupendo fin de semana dentro del EABE13. Antonio y su equipo han dedicado muchas horas a preparar un programa completo, divertido y variado, además de contactar con Celebrations y Guarderías Nanitos (a quienes agradecemos su participación) para que nos ayudaran en el #EABE13infantil. Ese ventilador que los niños y niñas nos regalaron es, por último, un buen símbolo para el EABE: aire fresco, vida, cambio, energía limpia y referescante.
En fin, hay muchas más cosas que ocurren detrás de un EABE pero no es cuestión de cansarte con una entrada más larga. Detrás de cada EABE ha habido siempre mucho trabajo y así tiene que ser: no es fácil poner en pie un encuentro sin presupuesto y que no responde al esquema clásico de un congreso o unas jornadas pero los participantes al EABE hemos decidido que así sea y yo, personalmente, estoy totalmente de acuerdo. Si organizar un EABE es interesante es porque hay que aprender a conciliar muchas voluntades (entre otras, las de las instituciones y empresas que nos ayudan), apelar a muchos compromisos, encontrar soluciones para pequeños y grandes problemas y reflexionar mucho acerca de qué significa eso que llamamos, místicamente, el «espíritu del EABE».
¿Compensa el esfuerzo? Claro que compensa: durante dos días he sido intensa y profundamente feliz. Tener a mis amigas y mis amigos del EABE en Algeciras ha sido un auténtico regalo. ¿Hemos acertado con nuestra propuesta de EABE? Eso te toca decirlo a ti, querida amiga, querido amigo. Nosotros ahora ya sólo pensamos en el #EABE14. Bueno, y en el #EABE15, y en el #EABE16,…
Salud
«¿hemos acertado con nuestra propuesta de EABE?»
Da igual la propuesta, EABE son personas, y el cómo se desarrollan los acontecimientos no depende de lo inteligente de la propuesta. Depende del brillo que los asistentes ven detrás de las pupilas de los que convocan durante el año de preparativos e insitu.
Así nos hemos dado y así os ha ido! 😉
Os felicito por todo el trabajo realizado, antes, durante y después del EABE.
Los proyectos que se cocinan con cariño saben siempre mejor. Sois unos artistas de las emociones y la educación. ¡Enhorabuena!
Después de leer el post, creo que señalas algo que ha sido (decidme si me equivoco) la aspiración consciente o inconsciente de todos los EABE previos: la evaporación del modelo expositivo. A mí me ha parecido más una organizada pista de circo, con dos maestros de ceremonias y una plantilla de 300 actores, malabaristas, magos y trapecistas (tomo la idea prestada de @sinucuantico). Horizontalidad, y si alguien se «destaca» lo hace lateralmente. Para mí, una felicidad, porque creo que el objetivo se ha conseguido. Tiene un precio alto: la pérdida del estrimin. Pero creo que solo hay que darle una vueltita, para que sea posible, al menos, la emisión en diferido del trabajo de los grupos. Una vueltita namás.
Un trabajo de lujo, Fernando. Y una parroquia que ni en los mejores sueños (en eso tengo que darle la razón a Aníbal)
Besos, y a descansar.
Ante todo felicidades porque este EABE sigue siendo como queremos que sea. Sin personajes que destaquen, aportando nuestras sensaciones y conocimientos, intentando contactar con la gente conocida y con la no conocida, intercambiando, compartiendo, bailando, bebiendo, comiendo, charlando y trayéndonos un proyecto colectivo para desarrollar.
Un abrazo
He aprendido mucho en este EABE. Pero, de lo que más, con diferencia, de estar pendiente de qué hacíais y cómo lo hacíais.
Yo sé, Fernando, que en twitter, los blogs, etc., se llevan los halagos. Hiperbólicos. Pero es que, de verdad, ha sido magistral. Ha sido una lección la que habéis dado de la que espero haber aprendido. No tendría perdón si no lo hubiera hecho.
Cuando uno tiene la suerte de encontrar gente que hace lo que vosotros, toca ofrecerse de currito y seguir las sugerencias guiado por la confianza. Porque donde yo veo una curva vosotros veis el paisaje que hay más allá.
Me fío de vosotros, de vuestros ritmos, de vuestros pasos. Ahora y siempre.
Me gustaría revisar, si acaso, y cuando tengáis tiempo lo del taller ambulante. Sé que da juego pero creo que tiene que ser con propuestas cerradas. Probablemente, como las líneas de trabajo, consensuadas previamente. Quizá sea posible hacer desde ya un banco de conocimiento con forma de taller virtual de la evaluación, que es el tema. Y sé que no estorba a la (des)organización, sino que se superpone a ella. En fin…
P.D. Ya me da complejo escribir cinco párrafos pero no sé hacerlo con menos. En fin…