Colegio Público El Chaparral
La diversidad lingüística es ya un hecho en nuestra escuela: los hablantes de nuestras «lenguas oficiales» coinciden en las aulas con hablantes de muchas otras lenguas. El rumano suena junto al wolof o al punjabi bajo la superficie homogenizadora del castellano, las lenguas co-oficiales, o las lenguas extranjeras.
Visitar centros donde esta realidad está presente se convierte en un ejercicio de reflexión y aprendizaje para el visitante. Ese ha sido mi caso en el Colegio Público El Chaparral, de la Cala de Mijas (Málaga). En este centro hemos tenido la oportunidad de compartir tres sesiones de estudio durante los últimos meses y la experiencia de este centro quizás pueda ser interesante para otros centros en circunstancias similares; por eso la traigo a nuestro blog.
El C.P. El Chaparral es un centro de Primaria con unos 480 estudiantes. De estos estudiantes en torno al 60 por ciento son británicos angloparlantes y el otro 40 por ciento está formado por estudiantes de distintas procedencias (origen chino, marroquí,…) y los estudiantes autóctonos.
Esta población estudiantil es una característica típica de la Costa del Sol que se repite en otros pueblos (Mija, Marbella, Estepona,…), planteando una situación que no coincide con la imagen más frecuente del «estudiante inmigrante» de origen latinoamericano o del norte de África en otras zonas del país. La diferencia entre una situación de submersión lingüística (como es el caso del estudiante marroquí) y la realidad del alumnado de origen británico en la Costa del Sol supone un hecho diferencial de gran interés para la enseñanza de segundas lenguas, considerando la creciente presencia de alumnado de la Unión Europea en nuestro país.
El profesorado de El Chaparral ha optado, ante esta realidad, por la acción. Cuesta enumerar de memoria todos los proyectos en los que están implicados, aprovechando el dinamismo que impone actualmente la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía: «Plan de Interculturalidad», gracias al cual hay dos profesores de ATAL – Yolanda y Luís – en el centro, «Centro Bilingüe», «Centro TIC», «Plan de Lectura y Biblioteca Escolar», «Escuela, espacio de paz», «Coeducación», «Plan de Apertura de Centro»… Es decir, ante lo que muchos de nosotros calificaríamos como una «situación problemática», el profesorado de El Chaparral está buscando respuestas educativas de calidad.
Esta búsqueda no significa que hayan encontrado soluciones satisfactorias o definitivas – la colaboración del Ayuntamiento de Mijas es fundamental, como la implicación de la Delegación Provincial de Educación en Málaga o la sensibilidad del Centro de Profesorado de Marbella-Coín. Quizás en El Chaparral no tengan todavía todo resuelto, pero están en el camino.
Y algunas claves sí nos enseñan: primero, las situaciones escolares requieren respuestas educativas no segregadoras, sino inclusivas; segundo, la conjunción de propuestas interculturales y cooperativas, el currículum integrado y el uso intensivo de las TIC es una línea de actuación prometedora; tercero, las tensiones internas, entre la dirección y el profesorado, entre los miembros del claustro, entre la escuela y los padres, requiere buena voluntad, imaginación y trabajo, pero sólo de una acción conjunta de todos los agentes educativos podemos esperar un resultado satisfactorio.
En fin, envío un abrazo a El Chaparral, con mis mejores deseos para que sigan enseñándonos el camino, con sus errores y sus aciertos. Gracias a gente como vosotras y vosotros podemos estar orgullosos de nuestra escuela pública.
Saludos
Bien, bieb, bieb.