Adios, 2010
Quemamos las últimas horas de 2010 y es buen momento de hacer balance.
Este año De estranjis ha estado menos activo en cuanto a entradas se refiere que otros años: sólo he escrito 77 entradas (incluida esta última entrada del año) frente a las 126 de 2009 o las 137 de 2008. Sin embargo, el número de visitantes ha seguido creciendo así como el de comentarios en las entradas, lo cual me complace y me anima a seguir escribiendo.
La explicación de este descenso, además de la siempre socorrida excusa del exceso de trabajo y de viajes (¿quién no lo tiene?), es el aumento de presencia en la red social y en Educ@contic. Aunque estoy en Twitter desde agosto de 2009, ha sido en 2010 cuando he participado activamente en la conversación; desde entonces han sido más de cinco mil tuits que me han permitido estar en contacto con casi novecientos amigos y amigas. En Facebook la conversación ha sido más informal, casi familiar, aunque de vez en cuando también he intentado colar artículos o entradas de blogs para provocar el debate (a veces con funestas consecuencias ;-). Por último, en Tumblr me he creado un espacio para lo lírico, para mostrar lo que leo y para las citas que me impactan – y debo reconocer que he disfrutado mucho haciéndolo.
Quizás la novedad más importante que trajo el 2010 fue la invitación por parte de Anibal de la Torre para participar en Educ@contic. Como precisamente hoy Juanma Díaz ha recogido qué es Educ@contic y quiénes somos sus dinamizadores, creo que es mejor que echéis un vistazo a su entrada si tenéis curiosidad por saber qué he hecho dentro de esta comunidad. Sólo quiero deciros que estoy feliz de formar parte del grupo de Educ@contic y que para mí ha sido quizás la experiencia de aprendizaje más importante que haya realizado alguna vez en la red.
Así pues, si sumamos las 22 entradas en Educ@contic a las 77 entradas en De estranjis y los miles de mensajes en Twitter, Facebook y Tumblr, podríamos decir que ha sido un año productivo en la red.
Y tras el balance de actividad en la red, la vida real.
En lo profesional, el año ha estado marcado por dos grandes temas: competencias básicas y proyecto lingüístico de centro. En mi cabeza no son dos temas diferentes y ambos son parte de una idea más amplia y más importante: la construcción de una escuela inclusiva de calidad.
La idea es sencilla: si queremos tener una idea de calidad, debemos luchar por una escuela inclusiva, porque la calidad se consigue cuando trabajamos para que todos los niños y las niñas aprendan en las mejores condiciones. Para ello es fundamental que determinemos hacia dónde queremos caminar y para mí las competencias básicas son el faro hacia el cual dirigir la nave. Y entre todas las competencias básicas, la competencia en comunicación lingüística es la puerta para el acceso a gran parte de los aprendizajes y al resto de las competencias básicas. Todo está relacionado.
En el camino de las competencias básicas mi compañero es Miguel Ángel Ariza y ambos formamos iCOBAE. Lo que comenzó como un encuentro de cuatro amigos para estudiar como asimilar una novedad normativa ha acabado por constituir un modelo de trabajo que se está pilotando en muchos centros en distintas comunidades autónomas. Como en el caso de Educ@contic, iCOBAE para mí ha sido una experiencia de aprendizaje: el modelo no es estático sino que hemos ido puliéndolo con las aportaciones de cientos de compañeros y compañeras en muchas sesiones de trabajo (este año, más de un centenar de actividades de formación). Por ello, gracias a todos los que han decidido hacer el camino con nosotros.
Otros temas han ocupado también mi atención (y han tenido reflejo en De estranjis): la relación con la familia, la lección de estrategias de enseñanza eficaces, el papel de la inspección educativa, creatividad y motivación, la mejora de la educación permanente, la coeducación, la difusión de los «centros Finlandia», la interculturalidad, la lectura, la evaluación, la enseñanza basada en proyectos y tareas, las comunidades de aprendizaje o el aprendizaje cooperativo.
Por último, cierro este balance del año pensando en el Sáhara, donde tantas personas subsisten con la esperanza de poder regresar algún día a sus casas. Vivimos en un mundo injusto: luchemos por mejorarlo, no lo olvidemos.
Gracias a todos. Os mando un fuerte abrazo.
Adios, 2010.
Bueno, veremos qué tal se da el 2011. Seguramente estarás igual o más liado que el año pasado, con multitud de viajes y experiencias. Mi deseo para este año, es que sigas con la misma ilusión y que no te falte felicidad en tu vida.
Te quiero hermano!
Pues ya ves, aquí a una hora de otro año. Rodeado de familia, después de un intenso día de amigos :p y desde un jodío móvil te mando un abrazo de esos de verdad, de los que cortan la respiración 😉
Seguro que el 2011 es tan o incluso mas productivo por tu parte porque eres un maquina. Pero, ten cuidado, no fuerces la maquina, compañero….que hay mucha gente que nos aprovechamos de ti para bien…
Gracias amigo. Iba a comentar la entrada, pero sólo suscribo el comentario de tu hermano. Seguimos.